Santiago Alvarez, poeta de la imagen revolucionaria

23 12 2010

(Interesante artículo sobre el conocido documentalista cubano publicado en Blogs&Docs)

Por Marcela Beltrán, Abril 09

Cuando Fidel Castro llegó al poder en 1959, Cuba ya contaba con una historia cinematográfica local, lo que la hacía ver como un referente para el continente. No obstante fue con la creación del Instituto Cubano del Arte y de la Industria Cinematográfica  (ICAIC) que la políticas relacionadas con lo audiovisual empezaron a tener peso dentro del emergente estado comunista. Es por esta época que el director Santiago Álvarez regresaba a la isla después de un largo periodo en los Estados Unidos, dónde además de realizar diversos trabajos empezó a sentirse atraído por el cine. Sus inicios creativos datan de los años 50, cuando hizo parte de la emisora CMQ. Años más tarde sus trabajos se plasmarían en el Noticiero ICAIC latinoamericano, telediario fundado y presentado por él.

Para seguir leyendo, aquí.





El documental y los movimientos sociales en Catalunya

23 12 2010

(Interesante artículo publicado en Blogs&Docs)

Por Dan Ortínez Martí, Sep 09

El 1979 la Asamblea de Trabajadores de Numax decidió gastarse las últimas 600.000 pesetas de la caja en la producción de un documental. Le pidieron a Joaquim Jordà que construyera Numax Presenta, una película sobre el proceso de autogestión de la fábrica. Han pasado tres décadas y se han multiplicado los documentales que salen de los propios movimientos sociales, es decir, desde las organizaciones asamblearias de base que trabajan fuera de los marcos institucionales.

Para continuar leyendo, aquí.





El documental español tras la dictadura: el difícil camino hacia la libertad de expresión

23 12 2010

(Interesante artículo publicado en Blogs&Docs)

Sin que se hubiera eliminado aún por decreto oficial la censura franquista, aparece durante noviembre de 1976 en la prensa nacional un inserto donde se informaba del estreno de Canciones para después de una guerra. La película de Basilio Martín Patino, que había permanecido confiscada por la correspondiente Junta de Censura desde el mes de abril de 1971, se proyectaba al fin en diversas ciudades del terreno patrio. Todo un acontecimiento que se anunciaba con un reiterativo juego de palabras: “Hoy se estrena una película que estrena libertad” .

La proyección de la película de Patino era, así, interpretada en esos momentos como la evidencia de que, sólo un año después de la muerte de Franco, se habían hecho avances significativos para la consecución de la libertad de expresión en un país que hasta hacía poco sufría los efectos de una larga dictadura. Esta sensación de avance se haría, además, oficial otro año después, cuando en noviembre de 1977 se impone un nuevo sistema de control que, entre otras cosas, vendría a eliminar la censura cinematográfica y a incluir la famosa calificación S – antesala de la X -, que no haría su aparición hasta 1983.

Para continuar, aquí.

Otros artículos relacionados:

Queridísimos verdugos de Basilio Martín Patino

Votad, votad malditos de Llorenc Soler





Nuevo proyecto documental de Josep-Maria Martín

7 02 2010

El artista visual Josep-Maria Martín que estuvo recientemente presentando sus proyectos en Spanish in Motion, estrena hoy en la Casa Encendida de Madrid un nuevo documental.

Piso patera de Josep-Maria Martín

En un piso de Lavapiés de 50 metros cuadrados vive Mouhamadou Bamba Diop, senegalés de 31 años, con 16 compatriotas y un español. Es uno de los muchos pisos patera que Madrid esconde con celo. Pero Bamba Diop se ha atrevido a mostrar su intimidad. «Nos daba vergüenza enseñar cómo vivimos, pero necesitábamos que se supiese», dijo ayer Bamba. El artista Josep Maria Martín (Ceuta, 1961) le propuso en mayo de 2009 narrar su llegada en cayuco a Canarias y su vida ilegal en España, su trabajo en el top manta y en la construcción, los controles policiales en la calle, la convivencia milagrosa en un hogar comprimido… y la memoria que duele: la tierra, la esposa, los hijos que dejó en África por un sueño irreal.

Aquí se puede encontrar un vídeo de tres minutos en el que se explica el proyecto completo.

Para más información sobre este proyecto se puede mirar en la página web del artista.





Queridísimos verdugos (1973/1977) de Basilio Martín Patino

28 11 2009

Para aquellos que durante los próximos días entréis en este blog nos gustaría llamaros la atención sobre este excelente documental español que, sin embargo, está bastante olvidado.

Basilio Martín Patino, el director del documental Canciones para después de una guerra que presentamos como primera proyección de nuestra Sesión III de Spanish in Motion, rodó clandestinamente en 1973 una de las obras más perturbadoras de la historia del cine español: Queridísimos verdugos (1977). Este documental sigue de cerca la vida y «actividad profesional» de tres verdugos españoles a principios de los años 70. Los tres verdugos son Antonio López, Vicente Copete y Bernardo Sánchez.

El documental es un alegato contra la pena de muerte -argumento que nunca se presenta directamente – y también el retrato espeluznante de una España a punto de salir de la dictadura.   Entrevistas e imágenes se complementan con artículos y titulares de prensa sin olvidar las referencias históricas al origen del garrote vil o detalles sobrecogedores de algunas ejecuciones.

En 1976, Miguel Rubio en su crítica sobre el documental en LA ACTUALIDAD ESPAÑOLA decía:

(…) No parece nunca que se den cuenta que la cámara les está rodando, que una máquina grabe sus palabras. Sólo en algunos momentos hacen algún guiño al espectador. Se sienten a gusto, naturales, espontáneos, llegan a parecernos unos actores excelentes. La cámara les muestra tal y como son, y esta diafanidad de la mirada provoca en el espectador como una especie de sobresaltado pavor. El verdugo es un mito de la Humanidad, pero Patino los muestra en su vida cotidiana, convertidos a la vez en espectáculo.
Pero el film alcanza todo su significado no en el hecho de que este material que parecía imposible exista, sino en todo el planteamiento histórico que se da del hecho de que exista una maquinaria legislativa tan barroca, de que la pena de muerte sea una costumbre histórica, de que tanta miseria sostenga hechos tan atroces como los que se nos narran. Porque Queridísimos verdugos es un film humanista, que no desprecia el espectáculo, que lo utiliza moralmente para comprometer al espectador. Alcanza un tono popular en la descripción de una serie de crímenes atroces, explicando tanto a los asesinos como a sus ejecutores. Es mas que una reflexión sobre la pena de muerte. Es una reflexión sobre la sociedad que la provoca. Una lacerante reflexión sobre la miseria de la condición humana. (…)Durante seis meses, en los sótanos de su casa, adherido a la moviola como a una piel, Patino trabaja con este material, al que da la forma de una cantata de Bach: una serie de solos, acompañados por elementos corales. No sólo hablan los verdugos: un psiquiatra, un magistrado, un abogado, un biólogo añaden dimensiones sobre los hechos. Imágenes de archivo, periódicos, dibujos, fotografías, y cuadros ilustran su trabajo, hablándonos del hombre en una situación límite: el hombre frente a la muerte administrada legalmente.

(Crítica recogida en la página web de Basilio Martín Patino)